Mucho se ha estado hablando de la compra de Opel por parte de PSA. Con esta adquisición, el conglomerado francés se convertía en el segundo fabricante de vehículos a nivel europeo y además, el primero en España.. Movimiento importante para el sector, pero sobre todo para Opel siendo uno de los mayores cambios de su historia.
Pero al mismo tiempo y sin hacer mucho ruido, la alianza Renault Nissan ha ido aumentando sus ventas hasta convertirse nada más y nada menos, que en el nuevo líder mundial en el sector desbancando a los ‘tres grandes’’ fabricantes de automóviles: Volkswagen, Toyota y General Motors. Un éxito mayúsculo que se ha logrado no sólo por el aumento de ventas sufrido en el primer semestre de 2017, sino también por la integración de Mitsubishi en el consorcio.
Mitsubishi terminó en manos de Renault Nissan tras verse implicada en uno de los muchos casos de manipulación de las emisiones. Dicho suceso provocó que sus acciones bajaran casi un 50%, momento que Carlos Goshn, el cabeza pensante y mandamás del grupo, aprovechó para comprar un importante paquete de acciones de la compañía japonesa.
Las cifras hablan por sí solas, con unas matriculaciones que alcanzan los 5,26 millones de vehículos en todo el mundo durante los seis primeros meses de 2017. De dicha cifra, 1,87 millones de unidades fueron para Renault, otros 2,89 millones de coches fueron cosa de Nissan mientras que Mitsubishi sumó al cómputo 494.3030 matriculaciones.
Por detrás de Renault Nissan se sitúa Volkswagen, con un volumen mundial de 5,15 millones de unidades seguidos de Toyota, con unas ventas en el primer semestre de 2017 que alcanzan los 5,12 millones de vehículos.
El grupo francés debe dar las gracias a los Kadjar y Captur, los SUV que tiene Renault en catálogo, así como al Qashqai, la gallina de los huevos de oro de Nissan. Modelos que están siendo un absoluto éxito de ventas año tras año y que según parece, seguirán por ese mismo camino la última parte de 2017 y muy posiblemente, todo 2018.
